miércoles, 7 de abril de 2021

Lo que no soy capaz de decirte

 Que no nos debamos nada no implica que no podamos darnos miles de sonrisas, millones de abrazos, miradas eternas y besos fugaces.

Me gustaría tener ese cariño pendiente y cobrártelo algún día. Que dejes de colarte en mis sueños para que te cueles en mi cama. Que en lugar de que hablen tus ojos, lo hagan tus labios susurrantes a mi oído.

Que con los años en lugar de quererte lejos, te quiero más, tan cerca como adentro. Que quiero más, que siempre voy a querer más. Que no me sacio ni me canso de ti.

Y te pienso y te imagino. Me pregunto cuando acabará esta llama que me consume, que por momentos parece que se apaga cuando me voy quedando sin oxigeno y aliento. Pero se reaviva desafiante, suplicante por tu boca, deseando que tus dedos descubran mi cuerpo.

Que no quiero leer mentes sino corazones. Que no vengo a darte el mío ni a pedirte el tuyo. Que la vida es corta y caprichosa, que hay tiempo y personas que no vuelven. Que quiero el sonido de tu risa resonando en la habitación, llenando el espacio, dejándome sin aire. Tu olor en mi ropa durante días. Que el tiempo se detenga bajo el paraguas. Que a metro y medio estás más lejos que a 600 kilómetros. Que quiero tocarte y abrazarte.


Y en ese abrazo ser capaz de decirte que quiero que no me sueltes nunca.

2021

No hay comentarios:

Publicar un comentario